Los cristales de CBD son la opción perfecta si buscas CBD de alta pureza y necesitas tomar una dosis fuerte. Son una de las formas más limpias y puras de CBD que están disponibles actualmente, con niveles de pureza de hasta el 98 % y casi ningún rastro de otros cannabinoides ni terpenos.
Los cristales se fabrican utilizando diversos métodos de extracción, como el proceso de CO2 supercrítico. El material vegetal se filtra para eliminar todos los componentes no deseados, como el exceso de ceras, y el resultado final es un aislado de CBD que tiene forma de cristal y se parece al azúcar fino.
Puedes moler los cristales hasta convertirlos en un polvo aislado y luego usar el polvo de diversas formas. Una de sus principales ventajas es que se pueden disolver en alimentos y bebidas, usarse por vía sublingual o incluso tópicamente. No hay absolutamente ningún rastro de THC en nuestros cristales de CBD, por lo que puedes tener toda la seguridad de que no habrá efectos adversos y de que no estás violando ninguna ley. Además, tampoco hay trazas de moléculas de cannabis.
Muchas personas usan cristales de CBD para dabbing, pero aquellos que no quieren fumar/vapear también pueden usarlos. Puedes añadirlo a tus recetas para hacer comestibles de CBD, o simplemente diluirlo en un vaso de agua. Gracias a esto, es muy fácil disfrutar de todos los efectos de los cristales de CBD con el mínimo esfuerzo.
Cuando se trata de dosificar cristales de CBD, tienes que tener un poco de cuidado para no sentirte más relajado de lo esperado y no desperdiciar el producto. Se recomienda empezar con 5 a 25 mg al día, mientras que la dosis inicial media es de 10 mg. Lo importante es tener una báscula precisa para poder pesar con precisión la dosis.
Echa un vistazo a nuestra amplia gama de cristales de CBD. Puedes elegir los sabores que prefieras y empezar a disfrutar de los efectos de inmediato.
